La valenciana Eme Cabanyes –y madrileña de adopción– superó un cáncer infantil a los siete años y, desde entonces, ha convertido su vida en una continua superación personal.
La periodista, comunicadora social y modelo nació en Valencia en 1987 y, justo el día de su séptimo cumpleaños, le detectaron un cáncer (sarcoma de Ewing). Como consecuencia, perdió prácticamente la pierna izquierda. Recibió quimioterapia y ya con esa edad supo lo que era que «le señalasen» por la calle a causa de su alopecia. El médico le practicó una rotoplastia completa, cirugía poco común en España que consiste en colocar la rodilla para que haga función de cadera y el pie de rodilla. Desde entonces, anda con prótesis y afronta su día a día con paso firme, como si se desfilara por la alfombra roja.
Eme Cabanyes es el ejemplo perfecto para demostrar que una discapacidad no es sinónimo de impedimento. La influencer, que lleva una prótesis en la pierna, enseña su día a día sin tapujos, con cercanía y normalidad a través de sus redes sociales. De esta forma, rompe ese techo de cristal de la intimidad femenina y sirve de estímulo a otras mujeres que han podido vivir situaciones similares a nivel de enfermedad o discapacidad. Porque, como bien ejemplifica Eme, «se puede ser en la vida lo que una se proponga», independientemente de sus capacidades, discapacidades, necesidades especiales o características personales. Su lema es toda una declaración de intenciones: Cambia la N de ‘no puedo’ por la Y de ‘yo puedo’
Le encanta retarse a sí misma y no se pone ningún tipo de barreras: ya sea a la hora de viajar, practicar deportes de riesgo o apoyar cualquier tipo de causa. Eme es un claro paradigma de que belleza, elegancia y seducción no son incompatibles con tener diagnosticada una discapacidad. Rebosa feminidad y es una de las mujeres con discapacidad más activas en Instagram y en la blogosfera. Solo con leer unos de sus su últimos post –‘Y después del cáncer, ¿qué?’-, nos damos cuenta de la fuerza y carisma que derrocha esta valenciana que también sueña con ser Gran Fallera. No hay nada que se le resista y, como ella misma bien dice: «No tengo límites, tengo alternativas».
Lifestyle, viajes, restaurantes, entrevistas o retos son algunos de los temas que podemos encontrar en su blog personal. Afirma que una de las cosas que más le gusta hacer por las mañanas es tomarse su café mientras lee el correo. “A la semana puedo recibir una docena de emails de personas dándome las gracias o pidiéndome consejo de cómo superar sus problemas. Otras personas simplemente se desahogan porque saben que detrás de la pantalla hay alguien que los comprende. Es muy gratificante”.
“No pensaba llegar hasta aquí, nunca quise ser famosa. Trabajo como social media y a las redes sociales hay que tenerles respeto. No quiero perder mi privacidad, pero, si puedo ayudar a gente y hacerles sonreír, ¿por qué dejar de hacerlo?”, afirma Eme Cabanyes, que no pierde el buen humor en ningún momento, incluso cuando recuerda cómo el cáncer no pudo apagar siquiera su sonrisa, aunque le marcara de por vida siendo una niña.
Numerosas marcas españolas ya se están fijando en ella y, de vez en cuando recibe colaboraciones. Pero ella no se limita a eso y quiere, a través de sus mensajes y ejemplos de superación, ayudar a personas a saltar o esquivar problemas, darles visibilidad para demostrar que una discapacidad no debe suponer un problema, así como afrontar una adversidad como una oportunidad nueva en la vida.