El tiempo ha pasado y el Covid 19 ha sido vencido y todos salimos y entramos. Corremos y paseamos más que antes, tenemos que compensar el tiempo de encerrona, un tiempo que no ha sido perdido.
No, ese tiempo no se ha perdido, esa encerrona forzosa nos ha servido a todos para apreciar lo que antes creíamos que era lo normal, que nos estaba en cierta manera debido. La libertad de entrar, de salir, de trabajar con los compañeros, de ir a un bar, de sentarnos en un banco a ver pasar la gente, todo eso lo hemos recuperado, pero ahora lo percibimos de distinta manera. Nos parece que el sol brilla más, o que la lluvia cae con más dulzura, que el viento tiene otro aroma, que las flores tienen colores más vivos y todo huele mejor.
Vemos a nuestra vecina con la que antes apenas cruzábamos unas palabras y sentimos ganas de abrazarla, de darle la bienvenida a esa otra vida que ahora empieza. ¡Cuánta alegría en ese encuentro!
Y ver de nuevo a la pobre mendiga que se instalaba a la puerta del mercado, comprobar que está bien, que ha resistido y a ella la sonríes y ella te sonríe a ti también. Es un reencuentro también con la vida, Con esta nueva vida que ahora empieza.
El reencuentro con los amigos, ahora más amigos que nunca, más cercanos, comprobar lo que se les ha echado de menos, compartir recuerdos, risas. Recordar y llorar juntos a los que se han perdido en este largo caminar y sentirnos más unidos que antes.
Abrazar a los padres, a los hijos, a los hermanos, a los nietos, cuánto hemos añorado esos abrazos, esos besos, cómo les hemos echado de menos, hay tanto amor, tanto cariño, tanta ternura que se desborda …ese redescubrimiento del cariño es algo que esa encerrona nos ha enseñado.
La encerrona nos ha enseñado todo eso, a apreciar, a valorar y dar gracias por lo que tenemos: la vida, la salud, el sol, las nubes, el campo, la ciudad, el pueblo, la lluvia, los vecinos, los conocidos, la gente, los amigos, los compañeros y la familia.
La encerrona, estoy segura, nos ha hecho mejores. Ha sido una lección dura, durísima para algunos, pero de la que todos hemos sacado una moraleja y vamos a vivir la vida de otra manera, la vamos a vivir mejor¡
M.E. (71)