Editorial
Feliz año nuevo. Estrenamos cómputo de tiempo, no tiempo nuevo. Porque cada persona percibe el tiempo de manera distinta, a pesar de que nos regimos por un sistema objetivo: segundos – minutos – horas – días – años.
El año se refiere al tiempo orbital del planeta tierra, es decir, al tiempo que tarda en dar una vuelta completa alrededor del sol. Estrenamos año.
Los egipcios calculaban que el año duraba 365 días. Los romanos crearon el calendario Juliano utilizado desde que Julio César lo instaurara en el año 46 a. C. consideraban que cada año duraba 365 días más seis horas, por lo cual cada cuatro años se contaban 366 días solares. A ese año cuarto se le llamó bisiesto.
El calendario Gregoriano, llamado así por su promotor el papa Gregorio XIII, es una corrección del año solar juliano, porque en 1578 unos astrónomos de la universidad de Salamanca descubrieron un desfase paulatino de tiempo en el calendario juliano. Después de una larga investigación, concluyeron que un año duraba 365 días, 5 horas, 49 minutos y 12 segundos. Tras la reforma gregoriana se suprimen como años bisiestos los años seculares no divisibles por 400 (así 1700, 1800 y 1900 dejan de ser bisiestos) y además se suprimieron 10 días, entre el 5 y el 14 de octubre de 1582.
Pero comenzar agenda nueva es tender una esperanza hacía la concreción de nuestros deseos, proyectos, planes y sueños.
La Terapia del Arte comienza su cuarto año de vida digital, también con nuevas ideas. Como llevar agua potable a 300 millones de personas que carecen hoy en día de ella, leyendo la entrevista al inventor Zanezzi. Como incrementar la ilusión leyendo la entrevista a Lecina Fernández. Como medir el coeficiente de inteligencia de una máquina…
Pero además queremos proponer a los lectores que colaboren en la redacción de la revista. Queremos solicitar participación por escrito a todas aquellas personas que practican con frecuencia el arte, en cualquiera de sus múltiples formas, como medio de mejora personal o de terapia.
Pueden ser maestros o discípulos. Personal médico o enfermos. Artistas o espectadores.
Autores o lectores. Puede ser…cualquier persona que se sienta con ganas de contar su historia en medio folio, es decir entre 330 y 380 palabras. Os esperamos.