Editorial

Mientras aquí, en el hemisferio norte, con mayo vuelve a llagar el mes de nuestras flores, en el hemisferio sur entra el otoño con fuerza barriendo las hojas. Y nos leen nuestros lectores de allí y de aquí. Pero es que es fundamental esta doble visión, porque como decía nuestro Ortega y Gasset, la realidad son perspectivas múltiples.

La noche y el día percibidos al tiempo. No vistos al mismo tiempo, pero sí pensados: la feraz primavera y el otoño feroz. El resplandor de la juventud y el decaimiento de la primera vejez son las dos caras de la misma moneda: la misma persona, tan sólo separados por el tiempo.

O la realidad tierra, norte y sur tan sólo separados por el espacio. ¿Sólo por el espacio? ¿Sólo por el tiempo? Hay mas separadores intangibles que las fronteras geográficas o los años.

Por eso en este mes de mayo apoyamos desde este nuevo número de La Terapia del Arte los proyectos intergeneracionales, con un reportaje modelo sobre “Mi mayor recreo”, los proyectos de ahorro de energía, la transformación urbana…

Es posible pensar en un mundo mejor, es más nos ponemos a trabajar en ello. En este mes de mayo, ahora. Con viento o con flores, donde estés: manos a la obra.