Actividades para el aula: La creación de un banco de sonidos
El sonido nos ayuda a percibir y valorar el mundo que nos rodea en todas sus dimensiones. Porque no es lo mismo lo que escucha un niño…
…en el centro de Madrid (España)…
…que en Uganda.
Sonidos de la jungla de Uganda
“Según la Ley del Ruido (37/2003, de 17 de noviembre) la contaminación acústica se define como la presencia en el ambiente de ruidos o vibraciones, cualquiera que sea el emisor acústico que los origine, que impliquen molestia, riesgo o daño para las personas, para el desarrollo de sus actividades o para los bienes de cualquier naturaleza, o que causen efectos significativos sobre el medio ambiente (…)La causa principal de la contaminación acústica es la actividad humana: el transporte, la construcción de edificios, las obras públicas y la industria, entre otras” (Fuente: Ayuntamiento de Madrid).
El sonido como fuente de conocimiento
Nos adentramos en el proyecto “El sonido que habito” del IES Bergidum Flavium, de Cacacabelos (León, España), donde se anima a profesores y alumnos de todo el mundo a que documenten (con móviles tablets, etc.) cómo suena su colegio, un rincón de su ciudad, un momento especial o su espacio natural favorito. Con las colaboraciones están creando un mapa sonoro donde se mezclan sentimientos, recuerdos y reflexiones sobre el mundo que nos rodea.
“Cualquier sonido como punto de partida para trabajar contenidos (también los transversales), procedimientos o actitudes” (Fuente: El Sonido que habito).
Este proyecto, diseñado y coordinado por Juan Carlos de Miguel Sanz, profesor de música y director del centro, ha recibido archivos acústicos de estudiantes y maestros de España, Perú, Argentina y México. Y ha recibido reconocimientos como el sello Aulas Inn, el seelo Buena Práctica Iberoamericana LEER.ES y la Peonza de Oro (VII edición de los Premios Espiral Edublogs en Junio de 2014).
El sonido de Fuenta Baja (Algodonales, Cádiz)
La toma de conciencia del sonido en que habitamos es el primer paso para conocer la realidad y nuestro grado de satisfacción con ella. Después podremos hablar, debatir, posicionarnos y actuar.
Solo se necesita un dispositivo electrónico que pueda grabar sonidos. Después se creará una base de datos del aula o compartida, y desde ahí las posibilidades de trabajo son infinitas.
En Lisbon Story, Wim Wenders nos sumerje en una atmóstfera onírica donde priman los sonidos de Lisboa. Un cineasta alemán pide a un amigo técnico de sonido que se encuentre con él en Lisboa, para trabajar juntos en un proyecto. Cuando éste llega, encuentra que el director ha desaparecido y ha dejado unas cintas con imágenes pero sin sonido. El técnico busca esos sonidos en las calles de Lisboa, sumergiéndose en la vida de sus gentes.
Trailer de Lisbon Story (Historias de Lisboa, Wim Wenders, 1995)