¿Alguna vez has culpado a tu pareja de tu infelicidad? Este comportamiento es muy común en las relaciones duraderas. Hay personas que piensan «si mi pareja quisiera viajar más, me sentiría mejor» o «si mi pareja me enviase mensajes todas las mañanas, estaría más contento». Y estos razonamientos parten de un error.
Esta es la advertencia de la doctora en psicólogía especializada en parejas Lisa Marie Bobby, fundadora de Growing Self Counseling & Coaching https://www.growingself.com/ en Denver (Colorado, EE.UU.). «Veo con mucha frecuencia que la gente utiliza una lógica falsa en sus relaciones», asegura la experta, tal y como recoge el medio CNBC. CNBC es un canal de televisión por suscripción estadounidense sobre noticias de economía, es propiedad de Comcast y opera por NBC Universal.
La doctora Bobby se refiere a «la forma en que piensan muchas personas sobre su infelicidad, creen que se debe a alguna circunstancia externa».
Este pensamiento puede llevar a una persona a pedir a su pareja que cambie ciertos comportamientos o que haga ciertos esfuerzos para así aliviar su propia ansiedad. Sin embargo, además de ser injusto, la experta recuerda que suele ser ineficaz.
Y es que la doctora Bobby sugiere que, en vez de pedirle a la pareja que cambie, cada cual se pregunte «¿Qué me pasa a mí?», «¿Hay algo que deba cambiar en mi forma de pensar o en mis habilidades de gestión emocional o en la falta de ellas?». Tal y como explica la psicóloga, el hecho de que tú no estés bien en tu relación, no significa que sea por culpa de tu pareja exclusivamente, sino que hay muchos factores que uno mismo debe analizar. Sin embargo, se suele recurrir a la falsa lógica. A lo más fácil, “la culpa es del otro”.
El problema es que intentar cambiar tu propio estado emocional controlando el comportamiento de tu pareja no funciona. «Cambiar las circunstancias para modificar tu propia experiencia emocional, no produce buenos resultados», dice la doctora Bobby.
“Tu pareja no está ahí para regular tus emociones. Por eso es importante que te preguntes qué puedes hacer tú, para sentirte más feliz y no cargar a tu pareja con esa tarea”.
Según un psicólogo de Harvard “«El motor de una buena vida no es el yo, sino nuestra conexión con los demás», asegura Robert Waldinger, uno de los investigadores del mayor estudio sobre felicidad.